Hualpen, (@JUNJI_Biobio). Bajo el título “Los beneficios de la Educación Parvularia desde la primera infancia” se desarrolló el primer conversatorio on line del nuevo Jardín Infantil “Sonrisas de colores”.

En la actividad estuvo presente la directora regional de Junji Biobío, Alejandra Navarrete, quien dijo: “Agradezco la invitación y como bien sabemos, diversos estudios nacionales e internacionales e incluso las neurociencias señalan que los primeros años de vida son trascendentales para el desarrollo de cada ser humano. Es por ello por lo que asistir al jardín infantil y la sala cuna es fundamental para potenciar todas las habilidades de los niños y niñas”.

Por su parte la directora del “Sonrisas de Colores”, María Elena Carriel, destacó la instancia. “Estoy feliz por la participación que existe. El conversatorio se basó en desarrollar un encuentro con las familias y la comunidad. Este es un jardín nuevo, que está en construcción armando el proyecto educativo con nuestras redes de apoyo. Si bien nuestro sello llamado sustentabilidad a través de la cultura y las artes ya está dando sus frutos, aún nos queda mucho por alcanzar y es una dicha ver cómo hay un compromiso real de todos”, explicó.

Durante el desarrollo del conversatorio se registró una alta participación de las familias, como el caso de Cristina Boffi, mamá de Javiera, quien expresó respecto a la educación parvularia que: “Son los mentores en la unidad educativa, refuerzan y apoyan los modales, las normas de convivencia de los niños y niñas”.

En esa línea otra apoderada Karen dijo que “no es solo aprendizaje de cosas como colores o números. Aquí veo cómo se comportan y cómo se inician en el trato con otros y que finalmente forma comunidad. El conocimiento se puede aprender en la casa, pero socializar se enseña en el jardín”.

Además, estuvo presente la presidenta de la Junta de Vecinos “Crepúsculo Gándara” de Hualpén, Mireya Osses, quien sostuvo: “Agradezco que los vecinos que en su mayoría son adultos mayores, aprendan a relacionarse con niños. Aquí nos hemos dado cuenta de que las educadoras de párvulos y las técnico en educación parvularia están preparadas para enseñar. Es lindo ver como las familias extranjeras y los nietos de nuestros abuelitos se insertan en el jardín”.

Por su parte, Nacari Mora, mamá de Elismar, del nivel sala cuna escribió que: “Considero que el trabajo que hacen es estimular a nuestros pequeños, les enseñan independencia y se evidencia la evolución que tienen los peques. Por ejemplo, Elis mi hijo, está más independiente y por mucho. Su soltura en el lenguaje también es notoria”.

Recordemos que el jardín infantil vivió recientemente su cambio de nombre y se llamará “Sonrisa de Colores”, proceso que se vivió con una alta participación de las familias.